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Me despierto, es último día del año. Unas nubes grises y el sonido de la lluvia, se mezclan con el ajetreo del gentío, en busca de el último “algo” de este año, de esta década. Me dirijo al baño, mi reflejo y yo en el espejo, con una sola mirada, nos decimos este año.
Hemos aprendido a llorar junto a nuestras almas, a correr junto a la confianza de un hermano, a acariciar el sol ;que roza el cuerpo desnudo de una mujer, a valorar las heridas de una vida que no era la nuestra y a hinchar nuestro interior con el aire de un abrazo.
Hemos brindado por nuestros pecados con una sonrisa, hemos escrito las más bellas poesías y roto los espejos de varias estrofas, hemos rimado para un èlla y hemos muerto en su nombre, hemos viajado en sueños por su boca y hecho el amor a su pronombre.
Hemos construido grandes amistades y otras se han reforzado, para un siempre sin nunca, hemos conocido a otras que se fueron por su pie, nos pusieron en un lugar lejano o nos alejaron de su lado. Nos hemos reencontrado con el olor de la familia bajo cuatro paredes, hemos valorado el amor de una madre, el ternura de un padre y el poder de tu hogar.
Nos hemos licenciado, hemos empezado otra carrera y hemos echo las paces con el inglés. Nos hemos echo echo más agujeros y dibujado nuestro cuerpo,hemos tapado cicatrices con el cielo y con el final.
Hemos recordado recuerdos y llorado por ellos, hemos despedido a amigos con lágrimas y otros con pañuelos, hemos hecho el amor y hemos follado, hemos besado labios dulces, carnosos, cristalinos y de ficción, hemos pasado horas en una cama con un cuerpo desnudo y hemos despertado junto a ese rostro con la garganta echa un nudo.
Hemos viajado por carretera y a través sueños, hemos pisado charcos y bailado bajo la lluvia. Hemos cantado con Leño y bailado rumba, (nos) hemos perdonado todo y pintado algo más de amor propio.
Hemos echado de menos desde kilómetros y desde metros, hemos vivido cosas muy buenas y cosas muy malas, hemos mezclado la pena con puntos y aparte ;y hemos intentado amar con arte. Nos hemos dejado llevar y hemos pintado líneas, con las palabras profundas de los latidos sobre un pecho.
Hemos tenido un final de diciembre que jamás creímos, hemos sonreído con este contigo y hemos terminado un año sin aquel sin ti.
Pero nunca hemos dejado ni dejaremos de sonreír.
Feliz año 2011!
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Y cuando tropezamos con ciertos textos, ciertas palabras que salen de corazones, cuanto menos... dulces, sonreímos. Sonreímos al descubrir que cuando falta muy poco para que termine un año de mierda, lleno de dolores (unos antiguos y otros nuevos), todavía se puede conocer a una persona distinta, llena de agujeros y dibujos, que llora y lo dice, que ama y lo dice, que sonríe y lo dice también.
ResponderEliminarQuizá esta era la mejor forma de cerrar un año pésimo, leer algo que abre una puerta al siguiente, leerte, leer tu adios y hsta pronto, en la pequeñisima transicion entre año y año.
Y qué razón tienes... hemos intentado amar con arte....
Un beso Txè, y bienvenido a mi vida, ¡me gusta haber entrado de alguna forma en la tuya!
Feliz 2011 :)