viernes, 17 de agosto de 2012

· Ayer ·





·


El último acento fue un silencio, 
porque en el tono ya no había latido,
se habían ido las palabras de cansancio
y sin luces la distancia se había perdido.

La piel sigue descosiendo la cama
y  la dirección de tus manos
ya no siguen mis miradas.

Insensato de ventrículo,
partiéndome el sonido de tu piel
y el recuerdo del pincel de tu pómulo,
porque desde el patíbulo de tu capitel
no me devuelves las llamadas ni el ayer.


·

domingo, 12 de agosto de 2012

· Aprendiendo ·




·

Después de un tiempo, uno aprende la sutil diferencia
entre sostener una mano y encadenar un alma;
Y uno aprende que el amor no significa acostarse,
y que una compañía no significa seguridad,

y uno empieza a aprender…
Que los besos no son contratos y los regalos no son promesas,
y uno empieza a aceptar sus derrotas con la cabeza alta
y los ojos abiertos,
y uno aprende a construir todos sus caminos en el hoy,
porque el terreno de mañana es demasiado inseguro para planes…
y los futuros tienen su forma de caerse por la mitad.

Y uno aprende que si es demasiado

hasta el calor del sol puede quemar.

Así que uno planta su propio jardín y decora su propia alma,

en lugar de que alguien le traiga flores.

Y uno aprende que realmente puede aguantar,

que uno es realmente fuerte,
que uno realmente vale,
y uno aprende y aprende… y así cada día.

Con el tiempo aprendes que estar con alguien

porque te ofrece un buen futuro,
significa que tarde o temprano querrás volver a tu pasado.

Con el tiempo comprendes que sólo quién es capaz

de amarte con tus defectos y sin pretender cambiarte
puede brindarte toda la felicidad

Con el tiempo aprendes que si estás con una persona

sólo por acompañar tu soledad,
irremediablemente acabarás no deseando volver a verla.

Con el tiempo aprendes que los verdaderos amigos son contados

y quién no lucha por ellos, tarde o temprano,
se verá rodeado sólo de falsas amistades.

Con el tiempo aprendes que las palabras dichas en momentos de ira

siguen hiriendo durante toda la vida.

Con el tiempo aprendes que disculpar cualquiera lo hace,

pero perdonar es atributo sólo de almas grandes.

Con el tiempo comprendes que si has herido a un amigo duramente

es muy probable que la amistad nunca sea igual.

Con el tiempo te das cuenta que aún siendo feliz con tus amigos,

lloras por aquellos que dejaste ir.

Con el tiempo te das cuenta de que cada experiencia vivida,

con cada persona, es irrepetible.

Con el tiempo te das cuenta que el que humilla

o desprecia a un ser humano, tarde o temprano
sufrirá multiplicadas las mismas humillaciones o desprecios.

Con el tiempo aprendes a construir todos tus caminos en el hoy,

porque el sendero del mañana no existe.

Con el tiempo comprendes que apresurar las cosas y forzarlas a que pasen

ocasiona que al final no sean como esperabas.

Con el tiempo te das cuenta de que en realidad lo mejor no era el futuro,

sino el momento que estabas viviendo justo en ese instante.

Con el tiempo verás que aunque seas feliz con los que están a tu lado,

añorarás a los que se marcharon.

Con el tiempo aprenderás a perdonar o pedir perdón,

decir que amas, decir que extrañas, decir que necesitas,
decir que quieres ser amigo, pues ante
una tumba, ya no tiene sentido.

Pero desafortunadamente, sólo con el tiempo…
 
J.L Borges
 
 
·

sábado, 11 de agosto de 2012

·




·

No ser amado es una simple desventura. La verdadera desgracia es no saber amar.


Albert Camus


 ·

jueves, 9 de agosto de 2012

· El otro ·




·


Soy la otra elección de tus monosílabos
y adverbios, por ser otro pronombre
diferente al significado de los que sigues
queriendo leer...


·

miércoles, 8 de agosto de 2012






·


Vayas donde tú vayas,
abordo de tu nave,
si te vas,
yo iré detrás.


·

sábado, 4 de agosto de 2012

· Incompleto bis ·

·

"Y yo solo con mis voces, y tú tanto
 estás del otro lado que te confundo conmigo."


Alejandra Pizarnik


·

jueves, 2 de agosto de 2012

· Complicidad de géneros ·









·


Sus palabras son el resultado de un conjunto de explosiones emocionales sin ningún 
rumbo, coherencia o finalidad. Se mueven por impulsos e  incoherencias,que ni comprenden,pero 
tampoco es algo que les preocupe. Rondan la más profunda bipolaridad del concepto moral que rodea al ser humano, balanceándose cual péndulo en el aire, sin preocuparse de las consecuencias de sus actos,
del peso de sus palabras o la influencia de sus intervenciones.


Saben de la persuasión, de la más pura manipulación, cual maestros ventrilocuos van tejiendo un telar
de premisas que acaban llevando a que se haga lo que desean, importándoles poco el resultado del mismo en la "persona-títere".  Como una lluvia de rocas, su pronombre se hace más pesado en las manos, las noches se hacen más insomnes, los papeles en blanco más bordes, las sonrisas infieles, las lagrimas testigos y la felicidad se va por el retrete. Pero en su caso, eso es un pasar del que no se percatan; y es más ni les importa, su puro egoísmo de género lo traducen en un "no pasa nada".

Y así es como se derrumba el silencio que guarda la complicidad de miradas.



·