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...y de las almas de papelón a peso de duro
que planean a ras de nuestros ombligos,
se precipitan las ganas sin seguro
en un siniestro fusco con vértigo,
éxito de bocas vacías,
ociosas de sinceridad en la edad
de piedra de dos latidos,
metido en tu agujero de sexo incipiente
a la luz de una farola en cuarto creciente,
¡SIENTE SIENTE!
que mi alma arde por que pelees para salvar mi sonido,
que desboques el tiempo de mi mundo,
soltando ese sordina falta de libido,
de hilo que sujete esta farsa en las sábanas de tu cuarto,
arto de gritarte ¡te quiero coño, te quiero!
borracho de alma grito alcohol de garrafa
y brindo por nada con los que se han ido,
un chupito de navaja por este adiós a mi otra alma.
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