Y con el suspiro de un trueno, fui a licores que sabían a rayos, los recuerdos,ahora eran idioma ajeno, y tus besos forasteros ,agua de mayo.
Tu hechura digna de drama, cosiendo a hilo el mejor papel, siendo el pelele de tu fama y tu la señorita del fantástico somier.
Mezquino de ventrículo y flechazo, era enfermizo de tu idioma en mí vida, tu pulso de amor lleno de rechazo, más era falsa tu constancia, y más rojas mis heridas.
tengo pena, pero muy bonito, ofú...
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