lunes, 29 de noviembre de 2010

·A primera vista·



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Nunca he sabido hablar bien cuando lo he necesitado,
decir las palabras correctas con lo gestos correctos.
Me he guiado por un revuelto de sentimientos cuando
he necesitado volar lejos de los pensamientos.
Una vez me enamoré de flechazo.
Fue como... una sacudida al diluir una belleza
de golpe en mi mirada, sin estar preparado para asimilarla.
... se llamaba.

Ahora no sé como explicar, contar o rimar
que sufro otro flechazo de estos...

Solo somos dos desconocidos y no sé como decirle
las ganas que tengo de mirarla a los ojos
y ponerle los labios rojos
de observarla estando solos.
Como decirle que quiero enterrar su pena bajo la arena,
intercambiar palabras por caramelos
que le suban el azúcar a su corazón.

Y me doy cuenta que no te conozco
y ya quiero desnudarte,
darte un abrazo de oso,
mordernos las historias sin final feliz
para tapar las bocas de la memoria.

Tengo miedo de dejarme llevar por mí, de las ganas de no morir por no mirar-te, por darte un abrazo más allá de una amistad y quedar extasiado por el relieve de su piel en mi piel.

Saber hasta el DNI de sus miedos, el grupo sanguíneo de sus secretos, el roce de voces de sexos bipolares, el sabor de sus labios al gritar, el olor de sus enfados, el pasar de sus pasados, el hastío de sus presentes, y la curiosidad de su futuro.

Ver escarpados capilares que hacen a sus piernas temblar.

Que las manos besen lo que el cuerpo desea, poner en simulacro a sus pupilas, en tensión a su tensión y que su pulso valla por bulerías cuando pase mi boca por su textura fría.

Anidar en la madriguera de su ombligo, pintarte un sino nuevo con la lengua, menguar entre sus piernas, perder la pena para vivir mañana, provocarle una revolución entre las sábanas, clavarle la mirada en la curva de la espalda, colgarnos en la copa de un orgasmo y despertar desayunando el cariño de nuestras manos.

Poder captar el brillo de sus ojos, abrir los cerrojos de las sonrisas con sabor a fresas, hacerle una fiesta por coincidir en canciones, verle en cada resorte del calendario, llamarle a diario, esconderme en los secretos de su armario, perderme entre sus brazos, que los abrazos purifiquen el olvido, hacernos un nudo en abrazos y un trabajo que se aprueba chuleándonos en la cama.

Pronunciar las palabras que tenemos olvidadas, darle picos a los poros del alma, no seguir esperando a que vendrá mañana, mirar su luz, oler como huele su sueño, perderme en las líneas de sus huellas.

Follemos con la mente de los locos perturbados , huyamos de este odio de la gente a quererse tanto.


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2 comentarios:

  1. primero que nada, gracias por dejarme tu blog en mi viejo y empolvado fotolog (alito_24) jaja

    segundo, wow! realmente me deja sin palabras tu texto.. me conecté..

    te sigo :)

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